La muerte de Carlos Cano Estremera ha impactado en el ambiente salsero. Muchos fanáticos y artistas ya se han pronunciado al respecto en redes sociales.
Rubén Blades, Gilberto Santa Rosa, Víctor Manuelle, Tito Rojas y Los Hermanos Lebrón son solo algunos que han posteado fotos recordando al ‘Dueño del Soneo’.
Uno de los mensajes más especiales fue el publicado por José Alberto El Canario quien recordó la vez que compartieron tarima, en 1995, en el ‘Duelo al atardecer‘ durante el Día Nacional de la Salsa.
Asimismo, el cantante dominicano aclaró que nunca tuvo diferencia alguna con Estremera y, resaltó su talento innato de sonear.
«Muchos pensarán que nuestra relación era un duelo, por el contrario, nunca tuve diferencias con mi hermano Cano. Lo admiré y lo respeté, considerándolo mi amigo y compañero», escribió.
El intérprete de ‘Bailemos otra vez’ sostuvo que Cano Estremera fue un propulsor de la salsa con un estilo muy particular.
«Fue un defensor fiel del soneo, un celoso de la rima. Me atrevo a decir, en una opinión personal, que Cano fue el «Mejor Sonero de Pueblo», un estilo urbano inigualable, jocoso, atrevido y directo, como solo él lo podía hacer».
«En nuestra salsa nadie identificaba más la calle y el pueblo que Cano a través de sus soneos. Muchos de nosotros adaptamos muchos de los inventos de Cano a nuestro estilo de sonear, me refiero a su sabia y controversial forma de sonear, esa forma con la que el pueblo se logra identificar», añadió.
En ese sentido, El Canario destacó la importancia del famoso ‘Duelo al atardecer’, realizado en el estadio Hiram Bithorn de San Juan, Puerto Rico, en 1995.
«Duelo al Atardecer, para Cano y un servidor, fue un empuje de popularidad a nivel internacional, ya que el público nos identificaba más como soneros que como simples salseros y nos exigía más y más sonear en las presentaciones. A tal punto, que se realizó una segunda ronda de duelos, muy famosa por cierto, por el fuerte debate entre mi hermano Domingo Quiñones y Cano, lo que provocó la conclusión de los duelos».
José Alberto El Canario aseguró que con la muerte del Cano «El árbol salsa perdió parte de su raíz». Además, envió el pésame respectivo a la esposa y la familia del sonero.
«Se nos fue un improvisador natural, amante de lo que hacía. Puerto Rico y el mundo salsero lo extrañará. Así, lo he podido notar por todo el cariño demostrado en las redes sociales, donde no ha quedado aquel fanático o colega sin expresar su admiración y respeto hacia el ‘Dueño del Soneo’, como prefería que le llamaran. Paz a su alma. Hasta el próximo «Duelo en la Eternidad», finalizó.
Este articulo original de: Salserisimo